miércoles, 4 de mayo de 2016

El Regreso 44

La discordia, los conflictos y enfrentamientos no solo están en la superficie de nuestro planeta (raza humana), también en las alturas se discuten, pelean, se vigilan y hacen algún que otro pacto.
Para algunas razas extraterrestres no significamos nada o menos que nada, para otras somos interesantes e importantes. Estas últimas en cierta forma nos protegen, intentan mantener un determinado control sobre las acciones que realizan aquellos para los que solo somos conejillos de laboratorio. 
Hay dos cosas que el ser humano no controla, dos cosas que surgen de nosotros mismos cuando algo nos complace o disgusta, las emociones y los sentimientos. Ambos generan una determinada frecuencia vibratoria que resulta muy sabrosa y tonificante para ciertos personajes extraterrestres sirviendoles de alimento.
Un escritor dijo: nunca nos van a invadir porque somos su alimento, un alimento energético que nosotros mismos les proporcionamos como consecuencia de nuestras emociones y sentimientos.
Esto es algo que puede entrar y comprender nuestro enmohecido cerebro, el hecho de que unos seres que nos llevan miles o millones de años de adelanto no necesiten materia solida para alimentarse.
Las guerras, las hambrunas, las enfermedades (algunas) pueden y estoy seguro que son creadas por ellos.
Las religiones, que separan al hombre del hombre creando violencia, las apariciones de ciertas entidades de caracter celestial, todo ello fabricado por unos seres manipuladores que tienen a la humanidad esclavizada y haciendonos creer que nuestra vida es un paseo de rosas. Nos creemos libres y haciendo uso del libre albedrio, y una mierda, ni somos dueños de nuestras vidas ni sabemos que es la libertad,
Aunque os cueste creerlo, aunque no querais creerlo, muchos de ellos se pasean entre nosotros, trabajan con nosotros y beben nuestra misma agua. 
Pueden cambiar su forma a voluntad, dominan la materia y carecen de escrupulos. 
La única forma que tenemos para combatir su actividad e intentar que su control de la humanidad cese, es mostrarnos siempre positivos, intentar dominar nuestras emociones y sentimientos intentando comprenderlos y aceptarlos. 
Incluso me atrevo a pensar que los desastres naturales, como terremoros, erupciones volcanicas, inundaciones etc.etc. son provocados por ellos, con el único objetivo de producir dolor y dar salida a la emoción. Porqué los desastres casi siempre ocurren en lugares desfavorecidos, pobres, dejados de la mano de las grandes potencias terrestres???. 
Tambien digo que otras razas trabajan a nuestro favor, Ganimedes, Orión, Pleyades y alguna más. No pueden realizar una intervención directa, pero si que a traves de sus muchos contactos con humanos nos alertan para que seamos analíticos, estemos atentos, que no aceptemos cualquier cosa que nos llegue sin haberla pasado antes por la medida de la razón.
Estamos inmersos en un gallinero cósmico, con pocos gallos y muchas gallinas

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